A mis poetas surrealistas
En noches sedientas
de inspiración,
suelto a mi perro andaluz
y se echa a correr
bajo un rayo de luna dormido.
Nostálgico y hambriento
vaga por rincones oscuros
donde reina el dolor y el desamparo;
el amor y el desamor…
olfatea sombras;
refunda el vacío.
Sacude su aletargada mandíbula
y engulle palabras abandonadas
donde la luz nunca llega directamente.
Se detiene a beber
en las gélidas aguas
donde beben los poetas.
Nadie lo toca…
trae una navaja
en su boca roja carmín.
Regresa a mí
y una lágrima crepuscular
dibuja el fino trazo
de su impronta
en la penumbra.
Aúlla sin ocultar su alma
y en el temblor
imperceptible de su ojo,
brota el tímido veneno
que desparramo
sobre el amarillo papel,
frenética y sin piedad.
Sandy 03 10 2010
4 comentarios:
Yo tambien aullo sin ocultar mi alma cuando te leo.
Sandy,por que casi no te veo.(Yo,insisto)
Que buen poema,amiga.
Siempre te quiero
BLANCA, AMIGA!!!! QUÉ GRATO ESTE MOMENTO!!!!! ESTA CASA ME FASCINA!!!
GRACIAS!!!! YO TAMBIÉN TE QUIERO!!
bendita la piedad que no tuviste!
miel o veneno para el papel!
el papel, de nosotros, nunca se apiadó...
un abrazo
b
ESTA CASA ESTA... SIN PUERTAS, SIN TELAS Y SIN TRAZAS... ESTA... DESNUDA...DE PIEDAD... REPLETA DE EXQUISITOS Y EXQUISITAS PALABRAS.
CADA VEZ... ME SIENTO Y ME HACEIS SENTIR MAS ILUSIONADA.
SONIA
Publicar un comentario